Se trata de un trastorno provocado por los cambios estacionales. La adaptación de nuestro organismo a las nuevas temperaturas y horarios pueden afectarnos tanto física como psicológicamente.
El cambio en nuestro ritmo biológico puede provocar cansancio, apatía, debilidad, cambios de humor e irritabilidad.
Síntomas y prevención
- Debilidad y cansancio
intenso que no responde a ningún esfuerzo ni desaparece con el descanso. - Cambios en los hábitos de sueño
- Apatía, falta de interés, tristeza, irritabilidad
- Dificultad para concentrarse
- Descenso de las defensas
que nos hace más vulnerables a los virus y las infecciones. - Alteraciones en el apetito
Consejos:
- Aprovecha la luz solar.
- Sigue una dieta equilibrada e hidrátate.
- Haz deporte.
- Evita las siestas y duerme 8 horas diarias.
- Puedes incluir suplementos alimenticios, siempre con la supervisión de tu profesional de la salud.
ASTENIA OTOÑAL